miércoles, 19 de septiembre de 2007

Recomendación, ahora literaria


Hago mía esta opinión:

...hasta que llegó George R. R. Martin a terminar con todos estos tópicos y quizás, para desgracia de los futuros lectores, a poner en la palestra otros que sin duda serán explotados de la misma manera.

Juego de Tronos es la primera novela de su larga serie titulada Canción de Hielo y Fuego, todavía en publicación en EE.UU., y como eso hay que tomarla. Como una novela de presentación de personajes y con tramas que no se cierran y apenas avanzan, pero que colocarán los cimientos para maravillarnos con lo que está por venir.


Nos sitúa en los Siete Reinos pocos años después de una guerra civil que ha terminado con el derrocamiento de la casa gobernante, la Targaryen, y que ha colocado a un nuevo Rey en el trono, Robert de la Casa Baretheon. Tras la muerte en extrañas circunstancias de su consejero, Robert se dirige hacia el norte, a los dominios de su viejo amigo Eddard Stark para pedirle que reemplace al difunto y se convierta en la nueva Mano del Rey. Al mismo tiempo, al otro lado del mar, los últimos descendientes de la casa Targaryen tratan de reunir un ejército que les ayude a recuperar el perdido trono de los Siete Reinos. Y si no fuese suficiente con eso en El Muro, una inmensa construcción de hielo inspirada en el Muro de Adriano que protege los reinos por su extremo norte, la Guardia de la Noche se prepara para enfrentarse a un terror olvidado que se agazapa más allá de la tierra de los hombres.

Uno de los puntos fuertes de Juego de tronos está en su estructura. Cada capítulo está centrado en un personaje principal y se nos cuenta cómo ve los sucesos que se desarrollan a su alrededor, con lo que nos encontramos a veces, con rabia, que aquello que se nos está presentando termina bruscamente debido a que el personaje deja de tomar protagonismo en la acción.

Para aumentar esa sensación de subjetividad, el estilo de Martin se adecua al personaje a través del cuál se descubren los hechos. Por ejemplo, cuando leemos los capítulos de Bran, Ayra o Sansa, que son niños entre 8 y 12 años, el estilo es ligeramente más infantil que cuando nos encontramos con los centrados en Tyrion o Catelyn, mucho más oscuros y maduros.

Martin se desenvuelve entre todos ellos con una maestría admirable, intercalando la acción en la que toman parte y alimentando una perpetua sensación de suspenso que nos retrotrae a las antiguas novelas por entregas o a los viejos seriales de televisión, donde al final del capítulo de la semana teníamos a nuestro héroe atado a una cadena de montaje y a punto de ser triturado, mientras la conocida palabra continuará aparecía en la pantalla del televisor. Ese clima de incertidumbre potencia todavía más su lectura compulsiva

Otro de sus puntos atractivos es que se trata de un libro duro y oscuro, sin concesiones. En ningún momento se reprime a la hora de describirnos las situaciones con todo tipo de detalles, por muy morbosas, horrendas o perturbadoras que puedan llegar a ser. Incestos, viajes a burdeles, violaciones, situaciones grotescas,... son contadas de una manera cruda que a más de un lector, quizás no acostumbrado, podría llegar a molestar, pero que indudablemente contribuyen a proporcionar al mundo que describe mayor viveza.

En definitiva, Juego de tronos es una novela maravillosamente bien escrita que coloca el listón muy alto para el resto de novelas de la saga, y que con toda seguridad se convertirá en un clásico de la literatura fantástica moderna. Aunque espero que Martin no acarree tantos alumnos a sus espaldas como el maestro Tolkien.

2 comentarios:

Fervellasverzas dijo...

Estimado mr. Fraga:

¡¡¡¡Es usted un vago, pero vago vago!!!!

DaPium dijo...

Estimada señora mía:

1- esto es un aperitivo. Mi opinión está siendo escrita en estos momentos. Pero requiere su tiempo para estar a la altura del libro en cuestión.
2- su comentario tampoco es muy trabajoso (¿10 palabras?). Estoy seguro de que puede hacer algo más digno.
3- ¿Cual era su blogg? No lo recuerdo, y me da rabia; porque sé que no para de escribir en él y actualizarlo; por favor recuérdemelo.
;)